lunes, 23 de enero de 2017

Adiós

      Hoy me he enterado con mucha pena de la marcha de un hombre que fue una suerte conocer. Ayer falleció el dramaturgo cubano Amado del Pino. Una persona que siempre tenía una palabra amable. Una gran anécdota con la que pasabas días riéndote. En un par de minutos te hacía sentir cómodo y que formabas parte de lo que ocurriera en ese momento. 

      Jamás olvidaré los amables y cariñosos que fueron él y su esposa Tania la tarde que nos conocimos en la Feria del Libro de Madrid. Y espero que la red en la que todo queda registrado nunca borre sus mensajes de aliento y sus palabras cariñosas cuando alguna vez me estaba un poco triste. 

      Amado, ojalá sigas brillando y repartiendo alegría sonde estés. Intentaré seguir tu consejo y sonreír, aunque ahora cueste un poco.